Laura Sin, Subdirectora Técnica de Recreación y Deportes del Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD), es mucho más que una funcionaria destacada. Es hija, madre, hermana, nieta, deportista, y una mujer abiertamente homosexual que ha forjado su camino con determinación y valentía. Con más de 20 años en el ámbito deportivo, Laura ha enfrentado y superado numerosos retos, tanto en su vida personal como profesional, convirtiéndose en un referente de fortaleza y diversidad.
Desde sus primeros años, Laura encontró en el deporte una pasión que la ha acompañado a lo largo de su vida. Inició su carrera en el fútbol, un deporte considerado para hombres, donde jugó durante más de una década. Posteriormente, descubrió el balonmano en 2012, un deporte que le ha dado múltiples triunfos y la oportunidad de representar a su país y ciudad en diversas competiciones.
Laura y su amor por el deporte
Laura Sin nunca ha dejado de ser auténtica, a pesar de enfrentar juicios y prejuicios por su identidad y apariencia. Desde joven, se destacó por su estilo único y su amor por el deporte, lo cual no siempre fue bien recibido por la sociedad. A pesar de ello, Laura ha mantenido su integridad y autenticidad, utilizando su experiencia para inspirar a otros a ser fieles a sí mismos.
"Yo me identifico como mujer pero soy abiertamente homosexual. Estoy casada con una mujer increíble y nunca he dejado de ser diferente", dice Laura. Su valentía para vivir su verdad y su lucha por la aceptación le han permitido superar momentos difíciles, como el rechazo inicial de su madre, quien hoy es uno de sus mayores apoyos.
Recuerda que el deporte, históricamente, ha sido un campo masculinizado, pero Laura ha demostrado que las mujeres hoy cuentan con un lugar relevante en este ámbito. Su trayectoria como deportista y ahora como directiva en el IDRD es una muestra de su tenacidad y liderazgo. "Hoy el deporte ha tenido una evolución distinta, pero sigue habiendo mayor porcentaje de hombres en las mesas directivas. Para mí, ser una de las pocas mujeres en cargos directivos en el deporte de Bogotá es una muestra de fortaleza", afirma.
Su papel como directiva en el IDRD
Como directiva, Laura trabaja para crear espacios inclusivos y seguros donde todos puedan disfrutar del deporte sin temor a ser juzgados por su identidad o apariencia. "El deporte seguro no solamente es para mujeres o chicas que han sido víctimas de violencia, sino también para las minorías y la comunidad LGTBIQ+", explica Laura, quien promueve un ambiente de respeto y diversidad en todas sus iniciativas.
Laura Sin no solo es una deportista que ha dejado marca a través de sus logros y participaciones, sino también a través de su compromiso con la diversidad y la inclusión. Su papel en el IDRD va más allá de la gestión deportiva; Laura trabaja para asegurar que todos y todas, independientemente de su identidad de género u orientación sexual, tengan las mismas oportunidades y un espacio seguro para desarrollarse.
"Tenemos derecho a ser libres, tatuados, homosexuales, heterosexuales, como nos dé la gana, y en el deporte no deberían de ninguna manera discriminarnos", enfatiza. Su consejo a los deportistas es claro: "Sigan siendo quienes son, no tienen que cambiar porque el entrenador lo diga. Sean libres, sigan soñando y trabajando por sus objetivos".
Laura es un ejemplo inspirador de cómo la pasión, la autenticidad y el compromiso con la diversidad pueden transformar no solo el deporte, sino también la sociedad en general. Su historia es un testimonio de que, con determinación y apoyo, es posible romper barreras y construir un mundo más inclusivo y justo para todos.
