La Copa América siempre ha sido un torneo que despierta pasiones y este año no fue la excepción. Colombia, con sueños de gloria, llegó a la final contra Argentina, pero el desenlace no fue el esperado. El 14 de agosto marcó un mes desde aquel partido que dejó a la selección colombiana con el sabor amargo de la derrota.
A pesar de este revés, la Tricolor ya pone su mirada en las eliminatorias sudamericanas, con la clasificación al próximo mundial como objetivo principal. La Federación Colombiana de Fútbol (FCF) había establecido como meta llegar a la final, y aunque los jugadores cumplieron, su deseo era hacer historia levantando el trofeo.
En un encuentro de alta tensión, Colombia mostró su calidad y cometió pocos errores frente a la campeona del mundo. Sin embargo, en el minuto 112, un descuido defensivo permitió a Lautaro Martínez anotar el gol decisivo que dejó a Colombia sin recuperación.
El jugador que confesó desechar la medalla de la Copa América
Carlos Cuesta, señalado por muchos por no haber cometido falta contra Lautaro, habló desde Bélgica sobre la final y reveló el destino de la medalla de subcampeón: "Las medallas del segundo puesto no merecen un lugar especial en mi mente", confesó en una entrevista con el medio HBVL, añadiendo que dejó la medalla en Colombia y que si hubiera sido de oro, la habría llevado a Genk entre risas.
A pesar de las críticas, Cuesta considera que tuvo una actuación destacada en el torneo y espera seguir siendo convocado a la Selección Colombia. "Fue una gran medida de valor", afirmó, recordando los enfrentamientos con jugadores de la talla de Lionel Messi, Vinícius y Rodrygo. "El hecho de que pude manejar el nivel me hace muy feliz", agregó.
Tras la lesión de Jhon Janer Lucumí en el primer partido contra Paraguay, Cuesta asumió la titularidad y formó una sólida pareja defensiva con Dávinson Sánchez. Este desempeño le ha asegurado un lugar en las próximas convocatorias, especialmente ante las dudas sobre la condición física de otros defensores como Yerry Mina y el mismo Lucumí.
Su regreso a Genk fue recibido con felicitaciones por su desempeño en la Copa América. "Me decepcionó un poco porque perdimos la final. Soy un jugador que quiere ganar a toda costa", expresó Cuesta, quien también destacó la calurosa bienvenida que le brindó su club.
Sobre los rumores de un posible traspaso, Cuesta esquivó la pregunta, enfatizando su concentración en su familia y no en el interés de otros clubes. "Si estás pensando constantemente en un traspaso, es imposible mantener la concentración", señaló.
Colombia enfrentará a Perú el 6 de septiembre en Lima y luego regresará a Barranquilla para prepararse para un nuevo encuentro contra Argentina, líder de la tabla de posiciones de las eliminatorias, el 10 de septiembre.
En resumen, Carlos Cuesta ha demostrado su fortaleza mental y técnica a pesar de la derrota en la Copa América. Su enfoque ahora está en el futuro con la selección nacional y su club, priorizando siempre el bienestar de su familia. Con una temporada que promete ser desafiante, Cuesta se prepara para enfrentar cada partido con la misma determinación que lo ha llevado a ser un defensor destacado en el fútbol internacional.
