James, entre el interés europeo y el respaldo del presidente del Sao Paulo

El fútbol, ese deporte que no conoce de constantes, nos regala historias de resiliencia y reinvento. James Rodríguez, el talentoso mediocampista colombiano, es protagonista de una de esas narrativas, donde la adversidad no ha hecho más que fortalecer su espíritu competitivo.

Llegó a la selección Colombia entre sombras de duda, arrastrando una temporada para el olvido con el São Paulo. Sin embargo, bastaron cuatro encuentros, tres de ellos en la Copa América, para que James se erigiera como la figura indiscutible del combinado nacional.